DECLARACIONES MACHISTAS

Por Flavia Choqueticlla

El domingo 31 de agosto, en Villa Tunari, el presidente Evo Morales decepcionó a los hombres y mujeres del país, cuando en tono de broma insinuó que los jóvenes deberían conquistar a las mujeres yuracarés para evitar los conflictos por la construcción de la carretera que pasará por el Territorio del Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS).

“Si yo tuviera tiempo, iría a enamorar a las compañeras yuracarés y convencerlas de que no se opongan; así que, jóvenes, tienen instrucciones del Presidente de conquistar a las compañeras yuracarés trinitarias para que no se opongan a la construcción del camino”. ¿Aprobado?”

Eso dijo Morales.

¿Fue correcto o no ese discurso? Desde cualquier punto de vista, mucho más tratándose de la primera autoridad del país, esas palabras mostraron una vez más la actitud machista que ciertas personas acostumbran en nuestra sociedad.

Aparentemente, se ha avanzado en la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres en los distintos ámbitos de la actividad pública y privada. El mismo Presidente del Estado tiene un gabinete de ministros, mitad hombres, mitad mujeres.

Quizás eso puede ser solamente simbólico. Aún así es importante; puede contribuir a abrir espacios de participación política y social para las mujeres, el sector mayoritario de la población.

Sin embargo, actitudes como las de Evo Morales le quitan valor a ese propósito y, al contrario, reproducen comportamientos machistas en la sociedad, alimentados por el discurso de una de las personas más influyentes del país. Evo Morales no ha pensado siquiera en su familia y en las mujeres de su entorno, como su hija, que seguro no quisieran escuchar palabras como las que pronunció en Villa Tunari, en el Chapare de Cochabamba.